La degeneración macular asociada a la edad (DMAE) es una de las principales causas de pérdida de visión en personas mayores, afectando tanto la independencia como la calidad de vida. Si bien existen tratamientos efectivos para la DMAE húmeda, la forma seca, que representa entre el 80% y el 90% de los casos, no cuenta con soluciones farmacológicas eficaces hasta ahora. Los pacientes con DMAE seca suelen recurrir a suplementos antioxidantes, hábitos saludables, y protección ocular, pero los resultados son limitados. Sin embargo, un avance innovador podría cambiar esta realidad. Un reciente estudio presentado en la AAO 2024, la 128ª reunión de la Academia Americana de Oftalmología, sugiere que la fotobiomodulación es una alternativa no invasiva prometedora para frenar la progresión de la DMAE seca y preservar la visión.
¿Qué es la fotobiomodulación?
La fotobiomodulación es una terapia que utiliza luz de distintas longitudes de onda para activar los procesos de regeneración y reparación celular. Aunque inicialmente se desarrolló para tratar lesiones musculares, neurológicas e inflamatorias, su aplicación en oftalmología ha cobrado fuerza. La terapia ya se ha probado en enfermedades como la retinopatía diabética y la retinosis pigmentaria, demostrando ser segura y eficaz. El tratamiento se lleva a cabo en clínicas especializadas, donde los pacientes reciben sesiones indoloras de exposición a luz en áreas específicas del fondo del ojo, particularmente en las células del epitelio pigmentario de la retina. Esta estimulación celular no solo mejora la función visual, sino que también retrasa el daño progresivo asociado con la enfermedad.
Según el Dr. David S. Boyer, del Retina-Vitreous Associates Medical Group, esta terapia podría ser revolucionaria al ser el primer tratamiento no invasivo capaz de mejorar la visión y ralentizar la progresión de la DMAE seca.
Resultados prometedores del estudio
El estudio presentado en la AAO 2024 involucró 100 pacientes con DMAE intermedia en ambos ojos. Cada participante recibió tratamientos tres veces por semana durante tres semanas, con sesiones repetidas cada cuatro meses. Los resultados, luego de dos años, fueron alentadores: 53% de los pacientes tratados mejoraron más de cinco letras en su agudeza visual. 73% de reducción en la aparición de atrofia geográfica en los pacientes que recibieron la terapia. En comparación, el 18% de los pacientes del grupo control (no tratados) perdió más de cinco letras de visión, reflejando la progresión de la enfermedad. Un futuro esperanzador para la DMAE seca Estos resultados sugieren que la fotobiomodulación no solo es efectiva, sino que podría ser la clave para intervenir en etapas tempranas de la DMAE seca, antes de que la pérdida visual sea irreversible.
Este enfoque tiene el potencial de mejorar significativamente la calidad de vida de quienes padecen esta afección, permitiéndoles conservar la autonomía en sus actividades diarias. Próximos pasos Actualmente, la FDA está revisando la solicitud de aprobación de la terapia de fotobiomodulación. Se espera que la decisión se anuncie en diciembre de 2024.
En caso de aprobación, los oftalmólogos tendrán una herramienta adicional para combatir la DMAE seca de manera proactiva y brindar nuevas esperanzas a sus pacientes.
Conclusión
La degeneración macular asociada a la edad ha sido un reto para la oftalmología, especialmente en su forma seca, donde las opciones de tratamiento son limitadas. La fotobiomodulación no solo representa un avance científico importante, sino que también podría cambiar la vida de millones de personas al ofrecer un tratamiento temprano, efectivo y no invasivo. Con esta terapia, el futuro de la DMAE seca parece más brillante que nunca.